El músico oriundo de Bernal se prepara para su segundo disco, bajo el concepto de las batallas internas de las personas por conseguir lo que anhelan. “Todo el tiempo peleamos con nuestro interior”, afirma.
Gasti se encuentra elaborando su segundo disco: “Versus”. El bernalense, de 25 años, trata de abordar los dilemas internos de las personas, el cuestionamiento moral y el deseo de lograr propósitos cuando se ven distantes.
-¿Qué refleja “Versus”?
– “Versus” es un disco más sentido y visceral, es más personal. Muestro más de mí en este disco, pero también cuento historias, hablo de lo que sentimos de nuestro pasado y hablo de la mentalidad de las personas en momentos de mucha angustia, de cómo nos sentimos en momentos inoportunos.
-¿Vos contra vos? ¿La pelea contra uno mismo?
– Creo que “Versus” refleja nuestra pelea mental, tal vez sea el no poder, saber que estás lejos de algo. Es importante preguntarse eso, porque hace que crezcan tus ganas por conseguir un objetivo, por querer alcanzarlo. Hace mucho que no hago terapia, pero considero que estamos todo el tiempo confrontándonos con nosotros mismos, con nuestra construcción como persona. Todos somos versus: todo el tiempo peleamos con nuestro interior. Creo que todos tenemos el angelito y al diablo en cada lado, el asunto es cómo uno transita los momentos difíciles.
-¿Qué pasa con nuestro pasado? ¿Lo castigamos?
– Todo el tiempo estamos chocando con nosotros mismos: con lo que fuimos, con lo que somos y con lo queremos ser. Cuando miramos hacia el pasado, vemos situaciones nuestras que nos descolocan y a veces sentimos que no nos representan. Vemos una publicación o un tuit que hicimos un par de años y entendemos que somos lo opuesto a eso. ‘¿Esto tuiteé hace tres años? Yo soy lo contrario a eso’. No hay que lamentarse, creo que hay que aprender.
-¿”Versus” es un escudo de autodefensa que las personas necesitan?
– Sí, en parte me ayuda a tener confianza. Creo que para deconstruirse hay que criticarse, hay que cuestionarse. Todo el tiempo choco conmigo. En este caso, el versus es una etapa de transición, entre lo que quiero y lo que es mi vida en este momento, por un lado, pensar en mi canciones y en pensar mi trabajo.
-¿Qué cambió entre el primer disco y en el segundo que estás preparando?
– “Deconstrucción” fue un desafío, dejé que mis influencias aparezcan en todo momento. Mi primer álbum tiene algunos guiños: a los Red Hot Chili Peppers, también hice un pequeño homenaje a Los Redondos, pero creo que “Versus” reúne varias situaciones que atravieso, donde las personas pueden sentirse conectadas.
Agregó: “Siento que “Deconstrucción” era un disco que tenía que hacer y “Versus” reflejan momentos míos. El proceso se está dando solo, “Versus” se está dando de forma natural, siento que las canciones están fluyendo y eso me encanta. Estoy disfrutando mucho del proceso de creación del álbum. Creo que “Versus” es un disco nocturno, es más fácil que se disfrute escuchando de noche. Me da esa sensación, por la construcción de las canciones”.
-¿Cómo fabricás tu música? ¿Primero pensás encontrar una letra o priorizás la melodía?
– Entiendo que tiene salir solo, en el momento indicado. Me cuesta mucho retomar una letra que dejé muerta hace un par de días, disfruto cuando siento que todo puede salir en ese momento, en el momento que siento que está formándose una idea clara. Creo que lo mejor es adueñarse de ese momento poderoso para darle forma a la letra, después pienso en la música.
¿Hay lugar para el amor en “Versus”?
– Sí, hay canciones románticas, pero aparecen desde una vista que se aleja. En este disco traté al amor desde un una perspectiva filosófica, entender al amor como una eternidad. No hablo del amor en el sentido de sentirse enamorado sino como concepto. Hablo del amor en el sentido de querer algo y no conseguirlo. Eso también es un versus. Eso también es amor, aunque no salgas las coas que deseamos.