El artista porteño acaba de estrenar “De frente”, nuevo corte adelanto del disco debut, que surge casi como un susurro y termina rockeándola con sensualidad.
Tras un largo período de selección junto al productor Agustín Mongelli, comienza a tomar forma su primer material discográfico que incluye nueve tracks y decide desmenuzar junto al sello Ultrapop. Empezando con “Seguir bailando”, a mediados del año pasado, y continuando con la canción y el videoclip que llevan el nombre del disco, “Big Bang”.
Esta etapa le permite brindar un show en La Tangente con banda completa y capturar registros audiovisuales de primer nivel. Posteriormente viaja a presentar los temas en diferentes espacios artísticos de Madrid y Barcelona.
A comienzos del 2020 libera “Puentes” y “Eclipse”; y actualmente disfruta del estreno de “De frente”, el quinto adelanto de su primer material discográfico que llega a las plataformas para renovar el rock latino de autor experimentando por distintos géneros.
¿Qué situación te trajo a este nuevo single?
Esteban Martínez: Creo que tiene que ver con esa necesidad que nos pasa a los artistas de volcar la parte sentimental a una canción. Es una de las formas que tenemos de comunicar lo que de otra manera no podemos. Alguien te puede escribir una carta, mandar una foto o escribirte un tema, casi como si fuera un mensaje a pedido.
¿Identificás algún momento de inspiración en las composiciones?
Esteban Martínez: Suelo trabajar más de día que de noche, pero la inspiración es más difícil de manejar porque, de repente, se te ocurre algo y es como una especie de momento epifánico. Lo lindo es que puede ocurrir en cualquier situación. Después pasa por innumerables revisiones hasta llegar a la instancia de la grabación y, más aún, cuando la tocás en vivo porque sigue evolucionando y cambiando en su forma.
¿Quiénes participaron y por qué los elegiste?
Esteban Martínez: Cuando tomé la decisión de grabar mis propias canciones, lo primero que hice fue llamar a Agustín Mongelli que es un amigo muy importante para mí y, a su vez, es productor. Me gusta trabajar con otras personas porque hace que los proyectos tomen seriedad y fluyan. En este caso trabajamos las maquetas y trasladamos la sencillez de las canciones al formato banda con batería, bajo, teclado y dos guitarras. Soy muy curioso en términos de producción y audio, eso me llevó a conocer a Victor Volpi, dueño de Estudio Pampa Trigal, que estaba dando un curso que me llamó mucho la atención. Fui a hablar de producción y cuando llegó la oportunidad de mostrarle las maquetas, me dijo que tenía que lanzarme a grabar y me propuso llamar a músicos. En ese momento no tenía en mente a las personas indicadas, así que sugirió a la dupla con la que había grabado hace poco: Julo Sobol, en batería; y Mauro Scaparro, en bajo. Yo me encargué de las guitarras rítmicas, coros y voz principal. Matías Mango hizo su aporte de primerísimo nivel en los teclados, al igual que Lucas Sedler con quien terminamos de conformar el sonido de la banda. Grabamos el total de las nueve canciones que incluye el disco y el resultado estuvo muy bueno.
Para el proceso final elegiste a Mario Sobrino y Cana San Martín.
Esteban Martínez: Sí, Víctor les mostró el material a algunas personas y entre ellas estaba Mario Sobrino. Él empezó a grabar en los Estudios RCA Víctor, que fue uno de los primeros de Buenos Aires, y actualmente es el ingeniero exclusivo de Litto Nebbia. Entre él, Victor y yo mezclamos el disco. Después nos fuimos una tarde a La Plata para masterizarlo con Cana San Martín, que considero uno de los tipos que más sabe de audio.
Decidiste lanzar de a un tema.
Esteban Martínez: Sí, al margen de la situación actual, creo que te la posibilidad de poner foco y darle ese espacio especial a la canción. Antes el estilo de publicar el disco entero, con dos o tres cortes, hacía que el resto quedara para las personas que deseaban profundizar. En un proyecto que se está dando a conocer, está bueno ir de a poco y mostrar las distintas caras.
¿Qué expectativas tenés en la recepción de la gente?
Esteban Martínez: Me pareció interesante publicar “De frente” porque, en estos momentos que estamos viviendo, la canción se resignifica. En el sentido de que trata de explicar eso que nos pasa en el cuerpo cuando nos encontramos físicamente con otra persona. Justamente hoy nos está faltando ese encuentro y el dejarse llevar por las sensaciones.