De bar en peor naufragué
con mi encordado más sano
y nos ganaron de mano,
puta!… una vez que tocan treinta y tres.
Nos inventamos un cielo
en medio de la semana,
que se nubló una mañana
y nunca más nos dejó de llover.
En San Telmo Resbalé,
Cáscara de bandoneón
Y de jeta al piso!
¿Cómo es que aún no he podido
acostumbrarme a mis pasos?
Descalzo de tus abrazos
camino en vidrio y no puedo poder
Acostumbrarme a la fe
y mucho menos a que falte gente,
con este amor insolente
hoy no me alcanza ni para un café
En San Telmo Resbalé
Cáscara de bandoneón
Y de jeta al piso!